El uso de calefacciones durante el invierno y la bajada de temperaturas pueden provocar mayor sequedad en nuestros ojos durante esta estación. ¡Cuídalos!
Seguro te habrán recomendado cuidar tus ojos bien durante todo el año. Mantenerlos limpios y sanos es imprescindible para prevenir problemas oculares graves. Por ello, con la bajada de las temperaturas durante el invierno, debemos poner especial cuidado.
El frío exterior aumenta el lagrimeo natural de los ojos, que normalmente no conlleva ningún problema grave. Sin embargo, las molestias pueden llegar a ser motivo de consulta oftalmológica.
Por otro lado, la calefacción produce un ambiente seco en los espacios interiores, produciendo sequedad ocular. Además, si eres un aficionado a los deportes de invierno, como el esquí, deberás poner más foco en la protección solar. La nieve puede llegar a reflejar en un 80-90% la radiación ultravioleta, multiplicando la exposición de nuestros ojos. La altura los expone a mayor cantidad de rayos UVA.
En este sentido, la excesiva radiación puede llegar a aumentar la probabilidad de padecer cataratas o retinopatías. Para ello, los especialistas recomiendan el uso de gafas de sol adecuadas a la práctica de estos deportes invernales. Los cristales siempre han de estar homologados, con protecciones laterales para evitar reflejos. Forma y tamaño correctos para permitir una buena visión de los colores, protegiendo también a los ojos de traumatismos.
Los especialistas oftalmólogos recalcan que frente a los cambios estacionales, la sequedad ocular o el lagrimeo están dentro de un contexto normal. Estos factores pueden llegar a ser molestos, pero con una rutina de cuidado específica, los ojos no llegarán a sufrir ningún problema ocular grave.
A los factores ambientales naturales y las calefacciones en zonas interiores, hay que añadir el uso excesivo de pantallas. Cada vez son más las horas que pasamos frente a un ordenador trabajando o con el móvil navegando. No somos conscientes del alto nivel de sequedad que llega a producir en nuestros ojos.
Lo mejor para prevenir esa sensación de “arenilla” en los ojos, es aplicar lágrimas artificiales entre 3-4 veces al día. Es preferible usar hialuronato sódico como lubricación externa, para aumentar la estabilidad en la superficie corneal.
¿Qué consejos son los más adecuados para cuidar la vista durante el invierno?
Existen 3 consejos fundamentales que debemos seguir correctamente para cuidar nuestros ojos del frío invernal:
- Haz uso de humidificador en tu hogar si tiene un ambiente excesivamente seco. Intenta evitar lugares que estén excesivamente secos también, de esta manera evitaremos la sequedad ocular.
- Desarrolla una rutina en la que diariamente te apliques entre 3-4 veces lágrimas artificiales para lubricar los ojos. Cuando tengas la sensación de tener esas “arenillas” en los ojos, haz parpadeos conscientes y frecuentes. Si haces uso de lentillas, deberás implementar estas técnicas especialmente.
- Tal y cómo te comentábamos, hacer uso siempre de gafas de sol homologadas en filtros y forma si practicas deportes de invierno. Especial cuidado en este aspecto con los niños.